Y pensó que estaba listo…


Hoy cometí la más grande estupidez de la semana. Si como supuesto día de san Valentín decidí hacer una llamada simplemente para desear feliz san Valentín. Sabiendo que no contestaría el teléfono esperaba la grabación sencilla y corta de siempre sin embargo me encuentro con un hi y un mensaje un poco más elaborado. Al escuchar su voz explicando el hecho de que no estaba disponible y que dejara su número y nombre etc etc en ese idioma tan peculiar quede en shock. Pensé que estaba preparado para simplemente dejar un mensaje y desear un feliz día pero el shock fue tanto que demore en poder decir algo coherente antes de terminar diciendo lo que iba a decir… al cerrar el teléfono me sentí como al principio una gran…. Y prácticamente todo el día si no fuera por que me distraje entre reuniones y charla con una amiga que me ha soportado durante todos estos días tan patéticos… finalmente pude contenerme y distraerme para poder llegar a mi curso este raro idioma nocturno y pasar un buen rato aprendiendo rápido, más rápido de lo que fue mi progreso con el japonés.

Al volver a casa no puedo dejar de pensar que tonto soy, que cuando uno cree que se ha hecho lo suficientemente fuerte un golpe de realidad nos recuerda lo frágiles que somos sin importar cuantas mascaras de “poker” nos pongamos. Si uno quiere sobre pasar algo existen 3 medios 1 la hipnosis 2 matar los sentimientos y 3 un accidente que borre la memoria de uno…. En la que me inclino es en la opción 2 y la 3 pero con la 3ra no podría lograr algunas cositas que tengo en mente… a ver qué pasa en los próximos días…

Ja ne!

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