Bajo la misma luna...

Esta es la historia de una pareja de niños huérfanos de esos que vemos por ahí. Unos niños tan unidos que parecían una sola persona. Ellos pasaban sus días de infancia despreocupados jugando tal cual dos hojas bailan al ritmo del viento en una tarde de diciembre.

Un día, despreocupados se encuentran con el más grande dilema de sus vidas. El niño, de un año mayor es adoptado por una pareja de extranjeros quienes le ofrecen una vida de afecto y ventajas que solo habían soñado hasta entonces. Por otro lado, la niña es igualmente adoptada, pero esta vez por una pareja de buenas personas que de igual manera, le ofrecen una vida mejor. Al encontrarse con este dilema ambos niños hacen una promesa a la luna de que mientras estén bajo ella, siempre podrán volver a verse sin importar que lejos se separen y que rumbo tomaran sus vidas.

El niño que disfrutaba de escuchar cantar a la niña todos los días, le pidió como deseo de despedida que se volviera una famosa cantante para así pudiera hacerse famosa y poder viajar al país donde el se marchara. El por su parte seguiría su sueño de ser astrónomo y contemplaría la luna por la cual ambos, sin importar la distancia, estarían conectados siempre.

Pasaron siete primaveras y al final de la octava, ya la niña había crecido y tenía trece años. Con una voz de ángel practicaba todos los días y escribía canciones pensando en aquel niño a quien prometió encontrarse bajo la luna algún día. Pero había un problema, y era que la niña siempre se había vuelto muy enfermiza y cantar siempre le afectaba mucho su garganta. Los médicos no sabían que sucedía debido a la corta edad de la niña y a los extraño de la situación. Sus padres preocupados, le prohibieron cantar a la niña ya que esto solo le hacia mas daño a su enfermedad de la garganta. La niña frustrada, en secreto aun seguía componiendo canciones y en ocasiones se escapaba de casa para ir a aquel lugar apartado en el bosque donde solía jugar con aquel niño que ahora estaba al otro lado del mar.

Un día camino al colegio, después de su larga ausencia por su enfermedad, notó una serie de panfletos que anunciaban un casting para un concurso para ser una nueva pop idol adolescente. El único problema era que el requisito mínimo era 17 aniso, sin contar que el simple hecho de que se trataba de cantar podría afectarle la vos de manera permanente, situación que sus padres no le permitirían. A pesar de todo, la niña se ilusiono con aquel sueño de ser famosa y poder viajar y encontrarse con el niño. En eso, la niña se dio cuenta de que un pequeño gato la estaba siguiendo todo el tiempo, al ver al gato este se sorprendió que la niña pudiera verlo y se escondió. La niña fue a su casa con el panfleto escondido y se dirigió a su cuarto donde por sorpresa se encontró al gato.

Este gato, de apariencia tierna, estaba tan asombrado que la niña pudiera verlo que le decidió preguntarle a la niña si podía verlo realmente. A esto, la niña respondió sin miedo alguno al hecho de que el gato acabara de hablar. El gato impresionado le informa que el no es un gato normal y que es un gato que la esta vigilando por que sus días están contados. Al escuchar de su destino, la niña le pregunto cuanto tiempo le quedaría de vida a lo que el gato tristemente le respondió: “no so suficiente para que seas una cantante famosa”. A esto, la niña, se puso muy triste por solo un instante, pero inmediatamente se compuso del shock de la noticia y decidió participar en el concurso pensando que nada mas le quedaba y que no importara si igual iba a morir.

El gato al ver su coraje y su determinación por alcanzar sus sueños decidió regalarle un bolígrafo, con el cual dice el, podría realizar sus sueños. Este bolígrafo le daba la facultad a la niña de poder transformarse en una muchacha de 17 años temporalmente. A su vez al tener el cuerpo de 17 años ya no sufría de la enfermedad que le aquejaba y podía ser ella como siempre quiso.

Dispuesta a poder encontrarse con su amado antes de fuera su tiempo de partir. Tomo fuerzas de donde había olvidado que tenía y asistió al concurso donde había jóvenes muy preparadas para esa historia. Por su empeño y determinación la niña pudo ganar aquel concurso al cantar como su pieza principal aquella canción que había escrito cuando era niña para su lejano amado. La canción se volvió un éxito al igual que la niña quien aprovecho la minima oportunidad para hacerse saber en todos los rincones de su país y así poder ser reconocida en el extranjero. Pero no todo era una historia soñada. Cada vez que la niña regresaba a su cuerpo original, los efectos de aquella enfermedad que había marcado sus días se hacia cada vez mas presente por lo cual le hacia mas difícil llevar la doble vida que tenia con tal de cumplir su promesa. Así que la niña decidió aun dar más de si, sabiendo que no le quedaba mucho y que daría hasta la última gota de su vida con tal de poder aunque sea una vez volver a ver al niño de su pasado.

Una tarde cualquiera, y debido a su esfuerzo, se le ofreció un concierto justo en el país donde aquel niño estaba viviendo. La niña, sabiendo que tenía sus días contados, dio todo y elaboro una gran historia para poder escaparse del cuidado de sus padres por unos días y emprendió su viaje junto a su compañero felino rumbo a cumplir su sueño.

Al llegar al pueblo estaba tan emocionada de contarle a aquel niño que había cumplido su promesa de ser una cantante famosa como le había prometido y que ahí estaba para verlo una vez mas debajo de aquella luna a la cual le prometieron volver a verse sin importar lo difícil que fuera.

La búsqueda fue ardua hasta que al fin encontraron con la ayuda del gato y de algunas buenas personas, el pueblo y el lugar donde estaba viviendo la nueva familia del niño. Dirigiéndose rápidamente al pueblo, no importo que el frío invierno pudiera afectar su salud. De hecho nada importaba mas en ese momento que comentarle lo famosa que era a su querido amado y que había realizado su ideal de ser cantante famosa para poder visitarlo.

Al estar frente a la puerta de la casa anunciada, sentía que el corazón se le salía por momentos, imaginándose como seria su reacción al verlo después de tantos años. Peor algo no estaba bien, la casa se veía muy descuidada y con un aire algo lúgubre para ser una familia tan amable como las personas de los pueblos anteriores los describieron.

La niña con algo de preocupación se acercó lentamente a la puerta la cual fue abierta de antemano por una señora de más de 70 años de mirada triste. Esta, al preguntarle en que podía ayudarle se sorprendió tal cual hubiera visto un fantasma al escuchar el nombre del niño pronunciado por aquella niña extranjera. Como si el invierno nevado se hubiera transformado en lluvia de otoño, las lágrimas de la mujer corrieron por sus gastados pómulos y le pidió a la niña que la siguiera en silencio. Al entrar a la casa la niña le muestra una foto del niño con sus padres adoptivos. La señora triste se identificó como la abuela adoptiva del niño dándole, además, una noticia que le helaría hasta el último rincón de su alma: seis meses del arribo de la niña a aquel país extranjero el niño y sus padres habían sufrido un accidente de tráfico en el cual no hubo sobrevivientes. El dolor en el corazón de la niña era tal que había perdido la noción de la realidad, y sin pensarlo, corrió hasta el cementerio en el medio de aquella tormenta de nieve tan solo para caer justo frente a la tumba con el nombre de aquel niño por el cual la niña había hecho lo inimaginable por volver a ver. La niña sin deseos de vivir se tendió ahí mientras la nieve la cubría lentamente robándole la poca vida que le quedaba. En aquel entonces, fue rescatada por ciudadanos del pueblo quienes preocupados por la niña salieron en aquella tormenta a buscarla.

Después de un día entero, la niña despertó en un cuarto extraño asombrada por la claridad de la luna de aquella noche despejada. En la ventana, había un telescopio apuntando hacia la luna, ella se encontraba en el cuarto de aquel niño quien tanto añoró volver a ver y cuyo sueño jamás podría ser realizado.

Con el ánimo decaído y sin ganas de vivir, la niña regreso a su país a esperar aquel momento que el gato que siempre la acompañaba había profetizado.

Al estar en su país, cayo enferma y fue llevada al hospital donde los doctores encontraron la causa de su mal y le comentaron que su condición podría mejorar con una operación muy riesgosa, la niña a quien ya no le importaba cantar ni vivir estaba en su cama tendida contando los minutos que le faltaba y pidiéndole al gato que no la hiciera esperar mas, que ya no tenia nada por que vivir. En eso el gato muy triste le dijo que no podía concederle ningún deseo pero que había alguien que había hecho algo imposible con tal de darle un mensaje. En ese momento apareció el alma del niño y tomando la mano de la niña le dijo: antes de que te dieras cuenta habías realizado tu sueño. Ahora tiene la oportunidad de vivirlo por siempre motivo por el cual tenia que seguir viviendo. La niña le dijo que nada importaba si el no estaba ya ahí para acompañarla. A lo que el niño solo respondió, “mi sueño era verte ser tu en tu máximo esplendor, y al cantar eras eso que siempre soné. Al escuchar a tu otra tú, supe de inmediato que eras tú a pesar de la apariencia diferente, y que esa canción hablaba de nosotros en aquel orfanato cuando éramos niños. Es por eso que vine hoy, para darte las gracias por cantar y no olvidarme en todos estos años. Te pido que ahora que tienes la oportunidad des lo mejor de ti y vivas para seguir viviendo tu sueño. A pesar de que ya mi cuerpo no es parte de este mundo, siempre estaremos juntos en aquellas canciones que has escrito toda tu vida. Siempre estaré contigo”.

Del rostro en silencio de aquella niña solo corrió una solitaria lágrima y sus inexpresivos labios formaron una tenue sonrisa la cual como un cristal al caer al piso se rompió súbitamente y sus lágrimas comenzaron a correr sin manera alguna de detenerlas. En eso la niña abrazo al niño cuya alma estaba proyectada y amanecer este desapareció solo dejando en su cama aquel collar que siempre portaba como amuleto de buena suerte. Con los rayos del sol entro aquel doctor quien le informó sobre el próximo inicio de su operación. La niña, con una sonrisa en la cara y aun con la muestra de las lágrimas sonrío accediendo a proceder.

Cinco años después frente a una tumba desolada en un país lejano una hermosa joven deja un hermoso ramo de rosas y un pequeño telescopio de madera. Mientras el rojo atardecer despedía al día una hermosa melodía cantada por la joven da la bienvenida a la hermosa luna de esa noche.

La canción era aquella que años antes la misteriosa cantante que se hizo famosa tan rápido como desapareció solía cantar tal cual el mas bello de los Ángeles…

Fin…

Bueno hoy no tenía cabeza para trabajar, de hecho si pero ya lo que había planeado para la semana lo había hecho y sin mi doktor vater que lo revisara hasta el lunes, pues me di mi chance de procrastinar un poco.

Igual solos somos mi cabeza y yo en este mundo.

No importa que tan separados estemos de los demás, todos vivimos bajo la misma luna…

Buenas noches…

ok no quiero comentarios literarios snobs... solo soy una planta que le gusta salir de su realidad para tratar de ver la suya propia desde una perspectiva diferente...